Hay canciones que no necesitan acompañamiento en prosa. Ésta, por ejemplo. Tantas y tantas, en realidad. Podría decir que, de haberlo sabido, en más de una ocasión me habría ahorrado la homilía, pero me conozco y sé lo que me cuesta mantener la boca cerrada y los dedos quietos. También podría decir que, de haberlo sabido, hace dos o tres viernes habría subido a la Fnac a escucharla, pero lo cierto es que lo sabía y no fui. En fin, como tantas otras veces. No pasa nada. Pero cuántas cosas sí, y cuántas cosas no, de haberlo sabido.
Club Nairobi, de Tomás Guillén Luna /Reseña nº 1044)
-
*Tomás Guillén Luna*
*Club Nairobi*
Editorial Tirano Banderas, 2022
La lectura, como la vida, te da a veces estas agradables sorpresas cuando
te reencu...
Hace 3 días
1 comentarios:
Pues sí, de haberlo sabido podríamos haber cambiado tantas cosas, pero creo que siempre lo sabemos, de algún modo, lo sabemos, pero nos dejamos caer por donde no debemos, o nos quedamos paralizados antes de tiempo. Cosas de la vida.
Publicar un comentario