Incapaz de zanjar la cuestión: torear o mirar desde la barrera, jugar o aplaudir, protagonista o espectador, vivir o escribir, cifras o letras, rojo o negro, por él o por todos sus compañeros, renovarse o morir, actuar o soñar. Pero con cuidado, que lo que se sueña se pierde de pronto y ese sueño le supo a poco. Un poco atrapado, sí. Pero no podría vivir por otro. Así que sigue aquí. En España. A las ocho.
La carta esférica
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La historia se desarrolla en dos tiempos distintos. En la primera, seguimos
a Coy, un exoficial de la Armada Española que ahora trabaja como cartógrafo...
Hace 2 días